Lanzarote un paraíso cercano

Lanzarote es una de las islas del archipiélago de las Islas Canarias en el Océano Atlántico, 140km frente a África Occidental. El aeropuerto se encuentra solamente a 5 km de la capital de la isla, Arrecife. Este paraíso tan cercano es conocido por su clima cálido durante todo el año, sus playas y su paisaje volcánico.

Lanzarote tiene un clima desértico subtropical con temperaturas diurnas medias que oscilan entre los 21 ° C en enero y los 29 ° C en agosto. La isla recibe, en promedio, solo 18 días de lluvia al año, lo que la convierte en un destino muy popular para los amantes del sol.

En este paraíso podrás dar un paseo en caballo o incluso en camello hasta el atardecer y luego cenar a la luz de las velas, acompañado de un delicioso vino, en una increíble cueva.

PLAYAS

En sus 169 kilómetros de costa, bañada por el Océano Atlántico, Lanzarote cuenta con un gran número y variedad de playas.

Inusualmente, para una isla volcánica, muchas de las playas de Lanzarote son de arena dorada, como por ejemplo la Playa Blanca, Papagayo y Famara, incluso encontrarás playas de arena blanca como Caleton Blanco. Su arena fina y tacto agradable harán que no quieras irte, aquí no tendrás preocupaciones. Existen playas vírgenes y protegidas con aguas cristalinas de tonalidades verdes. Aquí podrás bucear como si estuvieras en una piscina. Sin lugar a duda, Lanzarote tiene uno de los litorales más bellos de Canarias. Échate un rato al sol y tómate unos baños refrescantes, porque este es un plan imprescindible durante tu estancia en la isla.

PRODUCCIÓN VINÍCOLA

Una buena forma de conocer la isla es visitando sus bodegas y degustando los sabrosos vinos de Malvasía. Lanzarote, es conocida en todo el mundo por su producción vinícola, en esta isla encontrarás la bodega más antigua de Canarias y una de las diez más antiguas de España.

Elementos como el fuego, el viento y las rocas, crean unas condiciones extremas estableciendo las características de su agricultura, permitiendo el nacimiento de unos vinos con un marcado carácter y personalidad. A través de su característico sabor, conseguimos descubrir el alma de una tierra y un clima que resulta ser tan único y diferente como Lanzarote en sí misma.

 

BIOSFERA

El alto valor ambiental de la isla le valió el reconocimiento de la UNESCO en 1993.

El telón de fondo rocoso del Parque Nacional de Timanfaya fue creado por las erupciones volcánicas de la década de 1730. Este parque es una exposición reciente e histórica de vulcanismo que ofrece uno de los espectáculos visuales más impresionantes de Canarias. La casi ausencia de vegetación, la aspereza de las formas y la variedad de colores, como rojos, ocres, negros y naranjas, te dejaran encantado.

Estas tierras volcánicas de mil colores te darán las bienvenidas. La tranquilidad y el silencio de toda la isla invitan a desconectar para poder recargar energías en los largos días llenos de luz.S us peculiares paisajes conforman un entorno ideal para relajarse y perderse en sus volcanes, cuevas o playas vírgenes.

Cuenta la leyenda que los lugareños se escondieron de los piratas en las cuevas subterráneas de la Cueva de los Verdes, que ahora pueden ser visitadas por los visitantes más curiosos.

Respira la paz de la isla. Te sentirás tan lejos como si estuvieras viajando a otro planeta.

 

DEPORTE

Debido a sus largos y soleados días, deportistas de toda Europa eligen Lanzarote como destino ideal para la práctica de ciclismo, natación, deportes acuáticos o para correr. Sumerge en el mundo de los deportes acuáticos y ven a practicar un excelente windsurf en Costa Teguise y surf en Famara. Practica deporte como nunca habías hecho, aquí tendrás el privilegio de encontrarte en el paraíso.

OBRAS DE ARQUITECTURA

Hay una gran armonía no solo en la naturaleza, como también en el arte. La isla de Lanzarote contiene gran parte de las obras del genio César Manrique. Miles de turistas son atraídos por su excepcional arquitectura, visita la Fundación César Manrique. No te pierdas deslumbrantes obras como los Jameos del Agua, el Jardín de Cactus o el Mirador del Río, te dejarán boquiabierto.